Oh, Dios, que por la Inmaculada Virgen preparasteis digna morada a vuestros Hijo; os suplicamos que, así como a ella la preservasteis de toda mancha en previsión de la muerte del mismo Hijo, nos concedáis también que, por medio de su intercesión, lleguemos a vuestra presencia puros de todo pecado.

No hay comentarios:
Publicar un comentario